Pared del criadero, donde han estado las jaulas de cría. Se han aprovechado las clavijas donde se sujetaban las jaulas de cría, para colocar unas estanterías de la misma medida que las jaulas de entrenamiento. Coloco unas tapas de las clásicas cajas de folios en las estanterías. Estas tapas, impedirán que buena parte de las cascaras de las semillas, se derramen en el suelo. Los 4 laterales se refuerzan con unas grapas clásicas para papeles. Jaulas de entrenamiento en las estanterías. Estas jaulas, tienen en uno de los laterales y la parte posterior una lámina semitransparente de plástico. Detalle de la lámina de plástico transparente, cortada a una cierta altura para obligar a que el fife levante la cabeza para ver a su alrededor. Fifes colocados en sus respectivas jaulas de entrenamiento. Aquí podemos apreciar como los fifes levantan el cuerpo para sacar la cabeza por encima de la lámina de plástico. Ello les ayudará a mejorar su posición. Suelo utilizar estas credenciales transparentes de plástico con los datos de la anilla que lleva el fife. Preparada para colocarlas en sus respectivas jaulas. En resumen, se trata de que los fifes, poco a poco vayan adoptando una mejor posición. Yo tengo por costumbre, empezarlos a acostumbrarlos una vez terminada la muda. Suelo tenerlos una semana con la parte frontal de la jaula descubierta y otra semana con la parte frontal que lleva la lámina transparente. También procedo cada semana cambiar las jaulas de altura, y acostumbrándoles desde la posición más alta a la más baja.